jueves, 9 de junio de 2011

La perla de Guadalupe Victoria

Una vez más me valgo de las imágenes que encuentro en la red, mil disculpas a la persona que las subió, en ocasiones eso molesta. No doy los créditos debido a que fue a la carrera que busqué las escenas que necesito para recrear esto que creo será interesante, especialmente para los que me leen en Guaymas pues el dato que ahora comparto tiene que ver mucho con esa población que también está en el mar de Cortés.


En ocasiones visualizamos a este mar desde el lado de la península de Baja California y olvidamos el otro lado, el que incluye a todo Sonora y buena parte de Sinaloa... o será que como ahora vivo en esta zona, soy yo quien se olvida de esos rumbos, en fin. El personaje que ahora vemos es José Miguel Ramón Adaucto Fernández y Félix, el que fuera el primer presidente de México y que lo conocemos mejor por el nombre de Guadalupe Victoria. Su presidencia fue del 10 de octubre de 1824 a marzo de 1829, su Ministro de Relaciones Exteriores durante unos meses fue Lucas Ignacio José Joaquín Pedro Alcántara Juan Bautista Francisco de Paula [aquí van solo los nombres, siguen los apellidos] Alamán y Esclada, mejor conocido como Lucas Alamán. Antes de que Guadalupe Victoria tomara el poder había ya una avanzada inglesa para comprobar dos cosas, por un lado que no se diera una intervención norteamerican a la naciente nación mexicana y por otro comprobar las riquezas mineras de nuestro país.

Ahora vemos una escena en Marfil, Guanajuato, grabado de J. Clark basado en un dibujo de Emily Elizabeth Ward, esposa del que fuera el encargado de negocios de Su Majestad, el rey de Inglaterra. Pero, vamos por partes. En 1822 el Dr. Patrick Mackezie era el agente secreto británico que estaba comprobando esas dos cosas antes mencionadas y luego, cuando México era ya una República, fue que oficialmente llegó el encargado de negocios Henry George Ward. Era la segunda vez que estaba en México, anteriormente vino en una embajada a "sondear", por así decirlo y de forma oficial lo que ya había visto Mackenzie, su primera estadía es del 11 de diciembre de 1823 al 5 de febrero de 1824; un año más tarde, en marzo de 1825, ya instalado en la presidencia de la República Mexicana Guadalupe Victoria, llegaría con las cartas credenciales para observar el país y dar cuenta a Su Majestad, Jorge IV del Reino Unido. Ward nació en 1797, contaba 28 en esa segunda llegada, la cual hizo acompañado de su esposa, Emily Elizabeth, en México nació una de sus hijas la cual fue bautizada por una de las personas más ricas del país, la señora de Regla, del Condado de Regla.


Debido a la refinada educación de H.G. Ward y de su esposa, Emily Elizabeth, contamos en la actualidad con un documento que nos deja ver cómo era la vida en México debido a que él escribió y ella dibujó los viajes que realizaron por todo el país, los cuales se enfocaron principalmente a la región minera, de allí que hicieran tal amistad con los condes de Regla. En su relato fue anotando todo lo que veía en el camino, especialmente la facilidad en comunicaciones, distancias, servicios y cualquier particularidad que iba encontrando. Todo esto se tradujo en un libro que cobró tal importancia el mismo año de su publicación en Londres que hubo la necesidad de una segunda edición. Muy al modo de la época el libro si bien tiene un titulo corto Mexico in 1827, el subtítulo es largo: by H.G. Ward, Esq. His Majesty chargé d'affaires in that country during the years 1825, 1826 and part of 1827.


El libro lo había medio leído, pero en la versión que Lecturas Mexicanas publicó en los años ochenta, cuando lo hizo resumido, ahora que mi estimado Lic. Reyes de Moctezuma, San Luis Potosí me hizo llegar la copia digitalizada de la versión original, encontré algo que me llamó la atención pues, de algún modo menciona al mar de Cortés en un detalle del cual nunca había oído al respecto, aquí la versión original, es decir, en inglés:


"... in the gulf, pearls are found in great abundance; they are mostly of a small size, and these are so common in Mexico that they are worn by the lowest orders in the streets. But California, likewise, produce pearls of the very finest quality; nor do I know any part of the world where necklaces of greater beauty may be seen than in New Spain. The pearls of Madame de Regla, of her sister the Marquesa de Guadalupe, and Madame Velasco, are all remarkable for their size; and General Victoria is in possesion of an oyster recently sent to him from Sonora, which contains a single pearl not yet entirely detached form the shell, but perfect in all its parts, and larger, I think, than any pearl that I ever recollect have seen". (1)

Curioso en verdad leer este párrafo en donde da cuenta de la abundancia de perlas que hubo en la Nueva España, curioso también ver que habían pasado ya 7 años de la consumación de la Independencia y que a la publicación del libro, en 1828 aun se le nombraba la Nueva España. Y más curioso aun ver la referencia de Madame Velasco, la cual, sin lugar a dudas se refiere a María Ignacia Javiera Rafaela Agustina Feliciana Rodríguez de Velasco y Osorio Barba Jiménez Bello de Pereyra Hernández de Córdoba Solano Salas Garfias, quién conocemos mejor como la Güera Rodríguez.


El Mar de Cortés, abundante en perlas, ahora abundante en historias.., no me queda la menor duda.


Fuente:


Ward, H.G. Mexico in 1827. Vol II. Henry Colburn. London, 1828.

1 comentario:

  1. ¡Caramba! Mi comentario se borró por alguna tontería. Había escrito que esta entrada se me hizo muy, muy interesante por el óceano de tiempo que ha transcurrido desde que fue elaborado el manuscrito de Mr. Ward y como a pesar de ello siguen brotando historias de nuestras perlas y de cuán preciadas eran por nacionales y extranjeros. Aparte de es mención de la enorme perla ampolla de Victoria y que ¡era Sonorense!
    Muchas gracias por seguir aportando tus "perlas de sabiduría y conocimiento"...saludos desde Guaymas, Sonora en plena cosecha de perlas.

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