viernes, 23 de mayo de 2014

Dzitas, una escala más por el Oriente de Yucatán.

    De nuevo, abordamos un colectivo, luego de larga espera en Tinum, para seguir ahora al pueblo de Dzitas, que también es cabecera municipal. Lo primero que aprendo es que no se pronuncia así como lo leemos, sino que se dice: "Zitás", esto me parece curioso pues se dice que los niños que aprenden maya, tendrán la característica de hablar cualquier lengua con facilidad, lo digo porque la voz "dz" es usada en el árabe... (mero ejemplo).

    Hay algo en particular que quiero ver en Dzitas: la estación del tren. Son varias las estaciones en el abandono que he visto en Yucatán, Valladolid era el punto terminal, del tendido que venía de Mérida, pasaba por Izamal, continuaba por aquí, Diztas, seguía a Timun, Uayma y llegaba a Valladolid. Hay el fuerte rumor que el rumor de que el multicitado tren Transpeninsular retomará este trazo. Lo dudo, pues la intención es unir Mérida con Izamal y de allí a Chichén Itzá, para continuar a Valladolid, Cobá y Punta Venado, entre Playa del Carmen y Tulúm. Por lo tanto el tendido iría más bien de un pueblo llamado Quintana Roo rumbo a Pisté, que es la comisaría donde se ubica la zona arqueológica de Chichén Itzá.

    De nuevo estamos frente a la distribución de edificios principales en los pueblos de Yucatán: la parroquia, en este caso dedicada a Santa Inés, con su respectiva fiesta, que por acá se llama Vaquería, el 21 de enero. Vemos en ella la característica espadaña y, de la fiesta, me cuentan que en Dzitas hay la tradición de la Danza del Pavo, la cual, cuando se realiza no es otra cosa más que una verdadera matanza de guajolotes, creo que los descabezan al concluir la danza, pues es parte de los ritos ceremoniales de la vaquería en este punto de Yucatán.





    Encontramos nuevamente los monumentos al que fuera gobernador de Yucatán, Felipe Carrillo Puerto.

   Igual, igual es en todos los pueblos de Yucatán, en algunos, como en Tecoh, es un edificio magno, pero en todos los demás, especialmente los pueblos pequeños, veremos los arcos, formando un portal en el edificio de la Presidencia Municipal.

   Aquí vemos varias cosas, en primera esta mujer vestida con el tradicional huipil, cosa habitual en la región, tapada con su rebozo por el sol inclemente que pega de 1 a 5 de la tarde. Al fondo el templo que parece fortaleza, y esa empalizada, que no es otra cosa que el ruedo en donde se realizaron las corridas de toros, parte fundamental de la Vaquería, de la cual hablaremos próximamente.

   Y, claro es, como buen lugar en donde había una población antigua, ésta se formó en rededor de un cenote.



   Mira nada más, que fantástico anuncio encuentro frente a lo que fue la estación del Ferrocarril.


   Y vemos cuan importante es la apicultura en la zona, incluida en el escudo de la población.

   Estas ruinas que ves... y hay quien piensa que por aquí pasará el Transpeninsular...



Siguiente escala: Yaxcabá.... una maravilla este Oriente de Yucatán.

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